Los móviles nos siguen sorprendiendo con nuevas aplicaciones que hace poco, sólo tenian cabida en las películas de ciencia-ficción. Llegados a un punto, esas películas ya pueden ser acusadas de predecibles. El reconocimiento facial para la apertura de todo tipo de dispositivos no debe de sorprender a nadie; pero en este caso Mastercard, la marca de targetas de crédito y débito más famosa del mundo, va a poner en marcha un programa de prueba, de aquí a un par de meses. La idea es hacerlo extensible a todos los clientes o poseedores de la targeta: con una foto en nuestro móvil, tipo selfie, se valida automáticamente la Mastercard y se activa la compra. La apuesta por la biometría, que aplica técnicas matemáticas sobre los rasgos físicos para autentificar la identidad del individuo, parece que es la nueva y decidida apuesta. Apple, BlackBerry, Google, Microsoft y Samsung, eso es, la flor y nata de las superpotencias empresariales, están detrás del nuevo prototipo de aplicación de Mastercard. Intuímos que no serán los únicos.
Hace menos de dos años, la empresa americana AOptix ya introdujo un nuevo hardware y app package especialmente pensado para policías y soldados, que transforma un iPhone en un lector biométrico. De este modo, el escaneado del iris, de la propia cara o de la imprentas de dedos para reconocer a sospechosos, criminales o enemigos ya es una realidad financiada por el propio Pentágono. Pero aquí ya estamos hablando de una foto común de un móvil de cualquier usuario, y un código de identificación muy humano: el del propio rostro. En el video adjunto podemos ver su sencillo funcionamiento: haces una compra, centras tu cara en el objetivo de tu móvil, parpadeas, y sencillamente se valida tu compra. O al menos, esa es la idea.
Como hemos comentado más arriba en el caso de AOptix, el reconocimiento facial no es el único método biométrico, ni tiene porqué ser el más válido. Muy convencidos no deben de estar los de Mastercard, cuando paralelamente -y a la manera del AOptix app- están trabajando también en la posibilidad de la identificación a través de la huella de los dedos. Por tanto, el reconocimiento facial es sólo una alternativa para Mastercard; acaso por ser la más llamativa y popular, es la que han optado por mostrar. Pero la aplicación final, la que en un futuro no lejano checkeará nuestra identidad, no podemos dudarlo; será la menos peliculera y la más efectiva.